5 síntomas de un sensor de presión del tanque de combustible defectuoso (y costo de reemplazo)
A principios de la década de 1970, la EPA y otras agencias ambientales comenzaron a esforzarse por reducir las emisiones nocivas que presentaban las operaciones de los motores de combustión interna. Dichos esfuerzos involucraron la introducción de sistemas de emisiones por evaporación, diseñados para quemar el vapor relacionado con la gasolina que se purga naturalmente del tanque de combustible de un vehículo, dirigiendo dichos vapores a través del tracto de inducción de un motor.
Este proceso involucró equipos especializados de ingeniería destinados a monitorear, capturar y redirigir estos vapores según sea necesario. Uno de esos componentes producidos durante esta era fue el sensor de presión del tanque de combustible. Desde entonces, estos sensores se han rediseñado en múltiples niveles y todavía se usan actualmente en casi todos los automóviles legales para la calle.